miércoles, 25 de noviembre de 2009

LA RECESIÓN IMPULSA A LA ECONOMÍA INFORMAL (Análisis de medios)


CNNExpansión.com

11 de junio de 2009

CIUDAD DE MÉXICO (Reuters) — Una profunda recesión en México está llevando a cientos de miles de trabajadores a aceptar puestos laborales irregulares como arreglar tuberías, reparar televisiones o vender en la calles desde ropa interior hasta muebles.

Al amanecer, un grupo de personas espera con ansia el inicio de las actividades del ajetreado mercado al aire libre San Felipe, en el norte de la Ciudad de México, en busca de que se les asigne un espacio en la calle o en la acera.

Bonfilio Sarabia, de 30 años, perdió su trabajo hace seis meses como administrador de una red de cómputo en una empresa arquitectónica y ahora pretende vender componentes en el mercado.

"He buscado y no puedo encontrar trabajo", dijo Sarabia, con su mercancía expuesta sobre cajas de plástico. Para obtener más dinero, también repara computadoras a domicilio.

Golpeado por el desplome en la demanda de exportaciones desde Estados Unidos, México atraviesa por su peor recesión al menos desde mediados de la década de 1990 y se espera que la economía se contraiga casi un 6% este año.

Ello ha llevado a muchos mexicanos a la economía informal en donde generalmente ganan menos que los empleados de los negocios que sí pagan impuestos.

Se espera que la creciente pobreza afecte al conservador Partido Acción Nacional (PAN) del presidente Felipe Calderón en las próximas elecciones legislativas de julio.

Cerca de un 27% de los trabajadores mexicanos vio actividad en el sector informal en el primer trimestre del año, pero la cifra está más abultada desde que la economía comenzó a desacelerarse en 2007.

Pese a ser una gran parte de la fuerza laboral, los trabajadores informales solo aportan cerca de un 10% de la producción total del país, según el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).

Pero también implica que no pagan impuestos, por lo que Calderón ahora está bajo presión para que cada vez más gente aporte más tributos y las agencias crediticias amenazan con rebajar la calificación soberana de México.

Los ingresos tributarios de México representan sólo un 10% del Producto Interno Bruto (PIB), una de las tasas más bajas en América Latina.

Subterráneo

Cerca de 500,000 trabajadores han sido despedidos de la economía formal entre enero y abril, de acuerdo con el número de inscritos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), visto como un mejor parámetro para medir el empleo.

Algunos datos sugieren que unas 218,000 personas habrían ido a la economía informal.

Bajo las lonas azules y rojas que cubren el mercado San Felipe, más de 100 personas han instalado nuevos puestos este año en los pasillos y en las calles controladas por José Luis Orozco, uno de los dirigentes.

"Cuando no pueden encontrar trabajo, vienen conmigo", dijo Orozco, sentado al frente de una máquina de escribir y con la camisa desabotonada. Alrededor de él, los vendedores, a gritos, tratan de colocar sus mercancías como copias ilegales de discos compactos de salsa.

Algunas de las personas que recurren al comercio informal trabajan para empresas familiares, e incluso pequeñas fábricas manufactureras, que han mentido al Gobierno y han dicho que han cerrado para no pagar impuestos u otras prestaciones.

También hay otros jóvenes trabajadores como Alberto Lozano, de 18 años, quien llegó muy temprano a la oficina de Orozco con una caja llena de herramientas usadas para vender.

Lozano dijo que buscó trabajo todo el año en las fábricas instaladas en la zona de Vallejo, también al norte de la capital. Como muchos otros, Lozano solo terminó la educación secundaria.

"Dijeron que no estaban contratando o que tenían muchas solicitudes y no tenía yo la preparación", dijo.

El principio del texto es una mención al problema que aqueja a miles de trabajadores mexicanos –o ex trabajadores-. Enumera algunas de las actividades en las que estas personas han incursionado a raíz de la recesión en la que México se ha visto inmerso desde hace varios meses.

A estos datos le siguen lo que parece ser una crónica narrada desde el mercado de San Felipe (Ciudad de México) que describe a un grupo de personas reunido para comenzar sus actividades “laborales”.

El autor da un giro y aterriza en la situación particular de Bonfilio Sarabia, un hombre de 30 años que ha quedado desempleado y ahora se dedica a la venta de componentes y la prestación de servicios de reparación de computadoras a domicilio. El hombre asegura haber buscado trabajo sin éxito.

Después se mencionan cifras relacionadas con la baja de exportaciones a los Estados Unidos, situación a la que se adjudica la responsabilidad de la peor recesión por la que México ha atravesado, y a esta última, el que muchos mexicanos hayan decidido vivir de la economía informal.

Es curioso que se mencione que estas personas “generalmente ganan menos que los empleados de los negocios que sí pagan impuestos”. Cuando, otras cifras, señalan que los ingresos aumentan.

También entran en conflicto los datos que aseguran que el gran problema de México es la baja recaudación de impuestos, cuando el porcentaje de aportación de la economía informal es de sólo 10% con respecto al Producto Interno Bruto.

AMARTE DUELE (Análisis de película)


Fernando Sariñana

Altavista Films y Videocine


Aunque no es una película que trate exclusivamente sobre la Economía Informal, el trabajo que desempeña la familia de Ulises pertenece a este rubro y la posición socioeconómica en la que se coloca a estos personajes sí es un argumento central del drama.

Amarte Duele trata sobre el romance que surge entre dos jóvenes de muy diferentes clases sociales en la Ciudad de México.

Renata es una joven, hija de familia, que ha crecido en un ambiente de comodidad y abundancia. Ha asistido a colegios de “niñas ricas” y su círculo social lo conforman personas con preocupaciones económicas nulas.

Ulises es un muchacho que pasa la mayor parte de su tiempo en el puesto de ropa de su familia en un tianguis ayudando a su papá con las labores propias del negocio.

A ellos se les presenta como una familia de escasos recursos pero trabajadora. Que son conscientes de su posición en la sociedad y están resignados a permanecer en ella porque “así es como tienen que ser las cosas”. En esta película la figura del vendedor informal se estima por el papel que desempeña Ulises: buen muchacho, pobre pero trabajador, que ahorra para salir adelante y no por las implicaciones éticas o morales de su trabajo.

En realidad, es así como en la mayoría de los casos se pinta el problema de la informalidad. A través de los vendedores y no desde el punto de vista de las empresas evasoras de impuestos.

Por eso, es tan difícil y delicado calificar esta actividad porque, en sentido estricto, los vendedores no están haciendo otra cosa sino trabajar, comúnmente para mantener a su familia y procurarse ciertas comodidades –cosa que no tiene nada de malo-.

En estos casos, la informalidad es un mal necesario.


CENTRO DE INVESTIGACIÓN PARA EL DESARROLLO, A.C. (Entrevista)



  • ¿Existen límites dentro del problema de la Economía Informal?
El problema de la destrucción de la economía tiene también mucho qué ver con la realidad política y social de nuestro país. Influye en la vida particular de las personas, nadie está ajeno al problema.


  • Después del estudio que ha realizado esta institución, ¿se vislumbran posibles soluciones?
Se necesita innovar, buscar nuevas maneras de hacer las cosas que resulten en inversiones que favorezcan el crecimiento, el empleo y la generación de riqueza. Hay que aprovechar el constante cambio al que está sujeto de manera natural el ámbito económico. Es una cosa que ocurre todo el tiempo: nuevas empresas, productos, mejoras a lo anterior, ¡y eso impacta a todo el mercado!, pero hay que procurar también que esos cambios sean más y más, para no sólo responder a un estímulo, sino provocar la causa. Es la falta de adaptación a estos cambios lo que ha favorecido, en gran medida, al deterioro a extinción de ciertas empresas.

  • ¿Cómo valoran ustedes la situación del país?
No se puede negar que el país ha sufrido una transformación extraordinaria, sin embargo, sigue siendo susceptible a todas las crisis que puedan aparecer. El hecho de que la población en su totalidad no se integre a éste proceso de crecimiento es lo que hace que el país se estanque y hasta retroceda. Aumenta entonces el desempleo y la economía informal.


  • ¿Cuál es una de las principales causas del problema?
Lo que pasa es que al ciudadano no le importa si tal sector económico atraviesa alguna crisis, a él le importa su familia, el bienestar de los suyos, la educación de sus hijos, su tranquilidad. Por eso es que los medios para conseguirlos pasan a un segundo plano.


  • ¿Cuál se valora como el centro del problema?
Lo que quiere la población son oportunidades de empleo, lo que quiere el empresario es que el empleo no le cueste la empresa, lo que necesita la Nación es personas emprendedoras que arriesguen y paguen impuestos. La solución es complicada.

domingo, 20 de septiembre de 2009

COSA SERIA (Artículo)

Eugenia Siordia

El asunto de buscar trabajo es cosa seria. El interesado debe levantarse temprano para adquirir uno o varios periódicos y, si tiene suerte, para ser uno de los primeros en revisar las nuevas ofertas de empleo publicadas en la Web.
Después de leer con detenimiento cada uno de los 715 anuncios que contenga el Aviso de Ocasión, habrá de identificar y descartar sistémicamente todos aquellos con extensión de no más de dos líneas que escriban al final cualquier tipo de nombre como “Srita. Ortega”, “Srita. Azul”, “Dr. Jenny”, “Soraya”, “Lic. Fernando”; que agreguen imperativos como “¡urge!”, “¡contratación asegurada!”, “¡llámame!”, “¡yo enseño!”; u ofrezcan un sueldo de $1,100 pesos semanales por cuatro horas al día de lunes a viernes.
Porque, como bien sabe el desempleado, de atender a estos anuncios, lo más probable es que termine en una oficina destartalada, sentado junto a un grupo de 20 personas y frente a un expositor que le asegure que la única razón por la que no se les ofrece prestaciones de ley y Seguridad Social, es porque la “empresa” tiene la recta intención de pagar más a sus trabajadores y, que al fin y al cabo, el Seguro Social no sirve para nada más que restar números en las nóminas.
De 715 ofertas de empleo publicadas, únicamente 25 contienen las palabras “prestaciones de ley”. Las 690 restantes son sólo una variedad de extensas posibilidades para el no-reconocimiento del trabajador por medio de un contrato y para la evasión de impuestos.
La encuesta del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) indica que 12.1 millones de personas en el país (el 28.2% de la población ocupada) laboran en el sector informal, que la tasa de desocupación es de 2.3 millones de personas (5.1%) , y que el porcentaje de recaudación del país es de 8.96% con respecto al Producto Interno Bruto (PIB) .
Todo esto se traduce en la crisis que afecta a las familias mexicanas y en la forma en que éstas buscan mejorar su calidad de vida, conservar su patrimonio o procurarse las necesidades básicas; por lo general, por medio del comercio informal y la prestación de bienes y servicios no reglamentada. Y es que al ciudadano no le importa la economía del país más que su familia, el bienestar, la educación de sus hijos y su tranquilidad.
El problema de fondo, es que las condiciones tributarias no promueven un ambiente propicio para el desarrollo del sector privado. Mantener una empresa sale muy caro: entre el impuesto sobre la renta, el impuesto empresarial a tasa única (IETU), el impuesto al valor agregado (IVA), el impuesto especial sobre producción y servicios, el impuesto a los depósitos en efectivo (IDE), las retenciones de impuestos y las aportaciones al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); estar al corriente y pagar debidamente a los empleados, podría costarle la vida a cualquier PYME.
Pero la razón por la que las contribuciones fiscales son tan elevadas, es precisamente porque la recaudación es poca y aún así se le da una administración deficiente.
Sólo en la medida en que se invierta al crecimiento de la industria, a la innovación en los negocios, a la competitividad en el mercado, a una nueva legislación con base en principios de alteridad para nivelar la preferencia innegable hacia empleado a costa del empleador, se podrá conseguir que el sector formal acoja a la población que no había logrado incorporarse y goce de todas las seguridades que por ley le corresponden.